7 platos para refrescarte en Mallorca

Somos unos enamorados del Mediterráneo. ¿Quieres saber por qué? Porque nos encanta sentarnos a la mesa y saborear un auténtico viaje gastronómico bajo el sol. Porque los brindis improvisados saben mejor con un platito de comida que acompañe nuestros mejores momentos. Porque en nuestros hoteles en Mallorca disfrutarás de hermosos atardeceres desde las terrazas más exclusivas. Y porque queremos que descubras las maravillas de esta isla a bocados.
Ya sea en tu hotel en Mallorca, como en la gran variedad de restaurantes de cocina tradicional que se extienden alrededor de la isla, te presentamos 7 platos refrescantes que sí o sí tienes que probar durante tus vacaciones de verano en Mallorca.
1. Trampó. La ensalada por excelencia, y uno de los platos más refrescantes de la cocina mallorquina. El trampó se elabora a base de pimiento rojo, pimiento verde y cebolla, y es la base de la deliciosa ensalada payesa, a la que se le añaden patatas, huevos duros y tomate fresco. Una delicia refrescante que es el entrante ideal para disfrutar, por ejemplo, de un exquisito arroz colladet.
2. Arroz colladet. Una paella muy peculiar que se cocina a fuego lento con sepia, ñoras, ajo, hierbas aromáticas, caldo de pescado y tinta de calamar. Un plato muy sabroso que será tu principal favorito mientras lo saboreas, por ejemplo, a pie de playa.
3. Esqueixada de bacalao. Otra de nuestras ensaladas favoritas y una de las más famosas de la isla. Se trata de un plato muy refrescante que suele servirse como principal, o en algunos restaurantes como tapa, y que se elabora con trocitos de bacalo, pimiento verde y rojo, tomates y judías hervidas. Esta ensalada es muy típica de las islas y, de hecho, es la ensalada payesa de Formentera en la que se combina además, con pan duro.
4. Pa amb oli. El plato estrella del Mediterráneo, y uno de los imprescindibles para introducirte en la cultura mallorquina. Se trata de un plato muy sencillo de preparar y que es el compañero ideal para tanto para, desayunar, comer o para cenar. Consiste en combinar rebanadas de pan payés con aceite, tomate y embutido típico mallorquín como el camaiot, la sobrasada y el queso y jamón autóctono. Una delicia que te sorprenderá.
5. Coca de Trampó. Un entrante con mucho carácter. En una masa hecha a base de harina y huevo se extiende la ensalada de trampó, que puede ir acompañada de atún, carne, sobrasada o verduras. Aunque es original de Mallorca, este plato está muy extendido también por Valencia y Cataluña.
6. Tumbet. Un plato que sirve tanto para invierno como para verano. De origen vegetariano, el tumbet se elabora a partir de verduras de temporada cocinadas con berenjenas y patatas aliñadas con una salsa de tomates, aceite, ajo y sal.
7. Cardenal. Uno de los postres más representativos de Mallorca, y el más delicioso. Original del pueblo de interior de Lloseta, este exquisito pastel de crema se sirve acompañado de helado de almendra o vainilla, y es una delicia para los 5 sentidos. Un pequeño pecado que no puedes perderte durante tus vacaciones en la isla.
Mallorca es ese paraíso en el que podrás vivir unas relajantes vacaciones mecidas por el ritmo lento de las olas, pero también es un destino lleno de eventos, ferias y fiestas populares aderezadas con un gran surtido gastronómico que adquiere un tinte especial en verano. ¿Te lo vas a perder?
